Sin más

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Lloraba desconsolada sin poder mover su delgado y elegante brazo. Se cayó con el dichoso patinete hacia delante... Así que corriendo a urgencias para descartar fractura. Y como siempre una atención maravillosa, un mimo al tratarla..Ella me miraba con ojos llorosos y compungidos, ay mi bebé! Cómo te puedo querer tantísimo... Charlábamos de trivialidades para disfrazar el tiempo..Mientras un abuelito se quejaba al lado...

-Mamá me da penita...Lo que no sabía es que lo hacía cuando no le curaban. Miraba hacia  un lado y hacia otro, Si no veia a nadie gritaba  supongo que en busca de afecto, atención...Su hija le asistía con infinita paciencia

En el cénit de nuestras vidas nos volvemos niños...la fuerza de una caricia, de un beso, del amor vertido en los demás es inconmensurable...

-Mamá, me da penita el señor mayor...

Me enternecía, a pesar de su dolor se preocupaba. Algo estoy haciendo bien,  mi adorable proyecto  de personita..

No tardamos en salir..se empeñó en ir dando un paseo y así caminando las dos juntas de la mano charlando sobre viajes..sus pequeñas grandes tragedias descubrí que mi pequeña se está convirtiendo en una gran mujer...

Te quiero mi plumita..

 

 

 

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