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lascenizasdeangela

Me quedo con...

Desde que la conocí, la veía tan alta (yo era una mico), algo rechoncha por la edad, creo que en aquel momento tenía  unos sesenta años o así. Era tremendamente coqueta y chillona. Me encantaban sus historias de hacía casi medio siglo, unas tradiciones totalmente obsoletas pero que siempre me hicieron gracia.

Cada vez que venía el repartidor de huevos a casa siempre se peleaba con él, por lo visto tenía talla L y talla XL, el pobre hombre le decía -Escójalos usted señora!- así que al final siempre le daba gato por liebre, cogía los más grandes a precio de los pequeños, y siempre le daba uno menos-eso decía ella cada vez que venía-...el pobre hombre era un santo...

Llevaba batas de casa que eran casi un papel de fumar, viuda cómo era, estaba acostumbrada a ahorrar todo lo posible en beneficio de su única hija, aún recuerdo cuando fuimos las cuatro a ver en su vídeo una pelicula alquilada, -lo que el viento se llevó-, yo era pequeña, a mí me tocaron caramelos, a ellas un copazo de anís de un cuarto de litro, con lo cual pusieron de vuelta y media a Escarlata...superachispadas...con unas risas.

Le encantaba ir a tender, y como el vecino del once tenía perro...uffff, ella me contó que tenía fobia a los perros...y un día subió el pedazo de pastor alemán a la azotea...Cuando el bicho se puso de pie para hacerle zalamerías, ella se asustó tanto que bajó sin una de sus zapatillas chillando y llamando a mi madre- Pepiii, aquí hay un perro locooo!!!,

A veces me escapaba de casa para sentir ese saber antiguo, esas historias de hacía casi medio siglo, y como a ella no le gustaba hablar pues se juntaban el hambre con las ganas de comer...Hace poquito alguien le chivó que yo la quería mucho, y ella contestó que era mutuo el afecto..

Tenía tal pelea con el tema perros que cuando descubrimos que algún buen perrito se hacía pis en mi portón y en el suyo lo otro, cogió tal rebote que fue a buscar a la farmacia lo más fuerte que vió, usease azufre, entre mi madre y ella pusieron la macetilla llena de polvitos amarillos porque por lo visto éso lo que hacía era que le picase el culete al perro éste tan irreverente..y surtió efecto...lo que nos pudimos reír....

Me quedo con esa imagen de ella, con el respeto, su dignidad de viuda, su orgullo de echarle valor a la vida y sobreponerse a todo, de sus miles de historietas divertidas, su glotonería...de mi ternura hacia esta anciana adorable...

Mi recuerdo y mi oración para Mª Angeles. Siempre la querré.

 

17 comentarios

ADAL -

HOLA CARMEN

EL RECUERDO MANTIENE VIVOS A LAS PERSONAS QUE QUEREMOS .
DUELEN LAS AUSENCIAS , PERO ESTAN EN NUESTRO CORAZÓN .-

CARMEN
QUE LOS DÍAS A VENIR TE ENCUENTREN BIEN Y EN PAZ .

ADAL

A pesar de mí -

Es una historia bonita y entrañable, un bonito homenaje.

Saludos.

macarena -

Las personas mayores siempre tienen algo que decir y siempre con sus historias te logran sacar una sonrisa... :)

PS: Gracias por pasar por mi lugarcito...

Saludos

Humberto -

Cuando me encuentro con alguien mayor, pareciera que siempre quieren decir algo, en la micro, en el metro, en la calle. Pareciera que a cada hecho tienen su corolario, su opinión. Y era que no, si el tiempo y la vida son quienes regalan sabiduría, qué mejor que ellos para regalárnosla...
Saludos, gracias por tu visita.

Enric -

Pues si... las personas mayores son adorables... siempre aprendes. Muchos son un ejemplo de como tomarse la vida!

saludos!

enric

koko -

Hola !! mucho gusto , yo soy de Japon ,para mi los recuerdos es algo bien marabilloso que los tengo guardados en mi corazon !!

Luis Muiño -

Yo creo que ya no hay Mª Ángeles así y que tampoco la nostalgia es lo que era antes. Ha sido bonito leer que alguien recuerda...
Saludos

Carmen -

Sepa usted que hice los deberes pero ni en su blog ni en el mío me permiten caracteres chinos buaaaaaa!!!
Así que le paso directamente la página para que ponga usted enfebrecida y vea los dos simbolitos que salen...Conste que lo intenté:D
Saludos
http://babel.altavista.com/tr

vitore -

Dice pez que ya no hay Mª Ángeles así. Yo creo que si las hay, lo que tenemos que hacer es verlas antes de que pasen a mejor vida. Pero vamos; yo vivas conozco a algunas tan buenas y divertidas como la abuela a la que homenajeas aquí.

Esto no tiene nada que ver y en realidad no sabía si contestarte aquí o en mi propio blog. Se trata de explicarte lo que es un meme. Yo lo único que sé es que son como una especia de pruebas o de acciones que tienes que hacer porque te lo haya pedido otro blogger. Sirve en realidad para ampliar tus fronteras blogueras, pues al hacer el meme, te visita el que te lo ha endilgado y tú a tu vez visitas a otros que lo han hecho. Ahora, te invito a hacer el que acabo de publicar yo... Si quieres. Es facilito... ;) Besos.

Carmen -

Coincido con vosotros en que recordarla de esta forma es el mejor homenaje que le podía hacer a esta buena mujer...

isabelbarcelo -

Hay personas que se abren un hueco en nuestro corazón sin tener que hacer ningún esfuerzo. Y se quedan. Saludos cordiales.

pez -

Es una pena pero ya no hay Mª Angeles asi.

Basileia -

Un recuerdo precioso, seguro está encantada con él.

Besotes.

Luis Amezaga -

España estaba llena de abuelas magistralmente retratadas en tu post a cuenta de tu Mª Angeles.

xufeta -

Claro que si y sigue recordándola que eso es lo que hace seguir en ti. Jejeje menudo bromita le gastaba al perrillo, ya le vale.

Chasky -

Es bonito tener recuerdos agradables de personas que se lo merecen porque cuando alguien fallece es lo único que nos queda, así que para qué recordar cosas malas (que todo el mundo las tenermos), mejor las buenas que son más agradables de recordar.

María -

La huella que dejamos en los demás nos hace un poco más grandes y en cierta medida inmortales. Estoy segura de que tus palabras, si hubiera tenido ocasión de leerlas, le hubieran conmovido a la protagonista de las mismas, como nos conmueven a quienes no tuvimos ocasión de conocerla de una manera directa, pero que, paradójicamente, después de estas líneas, la sentimos como alguien cercano Gracias por el texto, invita a la reflexión, que nunca está de más. Sólo me cabe añadir que lamento que hayas tenido que experimentar esta pérdida. Para ésto de la muerte ya sabemos que no hay ni consuelo, ni explicación. Toca apechugar con lo que nos llegue y cuando nos llegue...se supone que el tiempo luego todo lo cura...En fin, a seguir adelante (me quedo sin palabras). Cuídate mucho, muuucho, niña (espero que me sobrevivas para poder dedicarme un texto tan bonito como este. Aunque no tan merecido, también hay que decirlo).
Un cordial saludo,
María.