Señora...qué mal lo llevo!!

La semana pasada se me ocurrió entrar en una tienda pija de zapatos, (de las que te clavan por sólo mirar)...

Así que muy dispuesta entro, observo y de repente, una chica se acerca para preguntarme-señora, ha visto algo que le guste?-(lo de señora lo llevo todavía mal para qué negarlo, con treinta y tres señora pues me deja  medio mosca)-desea algún tipo de zapato especial?, de fiesta? diario?-Así que me probé media tienda, pero lo que me maravillaba era el trato exquisito y lo pelota que se puede volver la gente según la apariencia, increíble...

Al final la chica acabó comentandome que había mucha señorona que utilizaba los zapatos juntos con los bolsos a juego y los devolvía, que había mucha gente con muchísimo morro...vaya tela con el personal...creo que en mi vida he hecho eso de hacer un cambio...lo más que hice fue una vez mangar unos cacahuetes y unas perchas de calcetines vete tú a saber para qué...

Creo que necesito que me peloteen otra vez...

2 comentarios

[Carmen - 20 de mayo de 2006 - 18:13]

Gracias María, siempre te he dicho que prevalece lo que importa...

[Prólogo Tardío - 20 de mayo de 2006 - 02:54]

El “Pienso, luego existo” que diría Descartes, resulta incompleto a la hora de diferenciarnos del resto de los animales. Los ,a veces, mal llamados “racionales”, tenemos además la necesidad de comunicarnos. No nos basta con vivir las experiencias; contemplar un amanecer, pasear por la playa o perdernos por las calles de cualquier ciudad no es suficiente. La mera experiencia individual, que para otro ser llenaría su existencia no nos basta, tenemos la necesidad de además contarlo, de impregnar con nuestras vivencias, nuestras ideas, nuestros pensamientos... al prójimo. Tal vez como forma de ratificarnos a nosotros mismos, o simplemente para intentar deshacernos por un rato de esa, a veces tan pesada ,soledad que forma parte de cada uno.

Y dentro de esta especie patológicamente ávida de comunicarse, se diferencia una que se esmera en desarrollar habilidades de expresión. No se limita ya a comentar sus experiencias, tiene la necesidad de narrarlas adornándolas con recursos varios, para así poder llegar e impregnar, a un mayor número de semejantes. Hay quien considera que son de por sí vanidosos, porque así podrán no sólo llegar, sino además, convencer con sus ideas a más gente. Hay quien los ve también débiles, por esa necesidad de llamar la atención para sentirse escuchados. Pero algo que hay que reconocer, es que este grupo diferenciado, siempre ha sido y será necesario al resto. No todos tenemos la virtud de expresarnos de la forma que nos gustaría, transmitiendo exactamente ese sentimiento que nos embarga, lo cual nos hace muchas veces incapaces de identificarlo. Pero ahí es donde la labor del escritor cumple una poderosa función para muchos, poder sentirse reflejados en los pensamientos de otros e incluso llegar a experimentar sensaciones y/o lugares que de otra forma no hubiera conocido. No siempre se les reconoce su labor a todos, por temas o intereses varios...Pero bueno, después de todo este rollo, a mí la parte que me incumbe, es la concerniente a este blog y a su autora, que ha tenido la deferencia de compartir sus fragmentos vitales en este espacio. Enhorabuena por el espacio, que me alegro que al final te lanzaras a ello. Ya se ve que va creciendo y espero que lo haga todavía mucho más, que no te canses nunca de escribir.

Para ser pionero hay que tener osadía. Para escribir a un público, querer ser leído. Pero para demostrar la amistad hay que darse cuenta de la importancia que pequeños gestos pueden significar a un amigo. Así que yo desde mi posición de farolillo rojo (en general en la vida), con la timidez de quien huye de miradas y opiniones ajenas y desde mi poca capacidad de expresión, te dejo estas líneas para poner un pequeño granito en este espacio que día a día vas cultivando con ilusión (esto queda pelín cursi me parece a mí)...bueno, el caso, que como diría algún lema del telepizza(o si no me lo he inventao, ni idea)...”nunca es tarde si la pizza es buena”, y ésta va con extra de buena intención.